Ernest Malinowski - ingeniero, héroe nacional de Perú

Elaboración: doctora Danuta Bartkowiak

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Ernest Adam Malinowski nació el 5 de enero de 1818 en Seweryny, en Volinia, como el tercer hijo de Jakub y Anna Malinowska, de soltera Świejkowska. Empezó sus estudios en el famoso Liceo de Krzemieniec, pero se vio obligado a interrumpirlos debido al estallido de levantamiento de noviembre. Su padre Jakub (miembro del parlamento insurgente) y su hermano mayor Rudolf (ayudante del general Henryk Dembiński) participaron en el levantamiento de manera activa. Huyendo de la persecución, la familia Malinowski abandonó sus propiedades en Podolia y Volinia; Jakub y sus hijos, Rudolf y Ernest, emigraron a Paris.

En cuanto se presentó la oportunidad, Ernest continuó sus estudios en el Lycée Louis le Grand y luego, al igual que Rudolf, estudió en la famosa École Polytechnique y en la École des Ponts et Chaussées (ambos se ganaron una reputación de muy buenos estudiantes). Hasta el año 1852 trabajó en Argelia y en Francia y después, firmó un contrato con los representantes del gobierno peruano y se trasladó a ese país.

Ocupó el puesto del ingeniero del gobierno y durante los primeros años trabajó en la construcción y renovación de varios edificios públicos, entre otros, la Casa de la Moneda, así como diseñó y supervisó los trabajos de pavimentación de calles y plazas en Arequipa. También estableció la norma del llamado etalón de oro, es decir, la cantidad de oro que contiene una moneda. Junto con el ingeniero francés Emile Chevalier, redactó los estatutos del Cuerpo de Ingenieros y Arquitectos del Estado. Además, impartió clases en escuelas de Lima y Arequipa, y pronto comenzó a trabajar en proyectos ferroviarios en la costa peruana.

En 1866, convocado a Lima por el entonces Ministro de Guerra José Gálvez (en privado su amigo), se encargó de fortificar el puerto del Callao, ya que entonces existía una amenaza real de conflicto abierto con España. Ernest Malinowski, junto con dos ingenieros, el peruano Felipe Arancibia y el colombiano Cornelio Borda, elaboró los planos de las fortificaciones, utilizando la línea ferroviaria Callao–Lima existente y cañones de largo alcance importados apresuradamente de Estados Unidos. Una vez todo estaba preparado, fiel al lema «por nuestra libertad y la vuestra», participó personalmente en las batallas en la fortaleza de Santa Rosa. La participación en la fortificación del puerto del Callao y en la batalla cambió por completo los planes de vida del ingeniero polaco. Reconocido como héroe nacional de Perú y condecorado por su valentía, no necesitó firmar otro contrato para permanecer en el país y continuar sus actividades.

En los años siguientes, trabajó en nuevos proyectos ferroviarios: Pisco–Ica, Chimbote–Huaraz, Pacasmayo–Guadalupe, Pacasmayo–Cajamarca. En 1870 se involucró en la realización del proyecto del ferrocarril transandino, cuya construcción fue financiada por el estadounidense Henry Meiggs, con la participación del gobierno peruano. Fue una empresa que requirió una cantidad inmensa de trabajo. El ferrocarril transandino estaba obteniendo mucha repercusión en el mundo, no sólo porque ascendía a alturas hasta entonces inalcanzables (casi 5000 metros sobre el nivel del mar), sino también porque representaba un milagro de la tecnología de la época. Para trazarlo, se forjaron cornisas en roca sólida, se formaron terraplenes con arena importada de la costa, se lanzaron puentes sobre abismos sin fondo y se forjaron túneles. Se construyeron un total de 63 túneles, incluido el más largo, llamado La Galera, perforado a 4768 metros sobre el nivel del mar. El puente ferroviario más famoso, el de Verrugas, situado a 84 kilómetros de Lima, tiene 218 metros de longitud y 80 de altura. Durante la construcción y la posterior explotación del ferrocarril transandino colaboraron ingenieros y empresas americanas, inglesas y francesas, entre ellas la compañía de Gustavo Eiffel.

En 1874, sobre la empresa se cernía el espectro de la crisis económica. El nuevo presidente de Perú, Manuel Pardo, a pesar de su afecto personal por Malinowski y su comprensión de la necesidad del ferrocarril, finalmente tuvo que detener su financiación. Para salvar la inversión, se procuró no interrumpir las obras y reducir todos los gastos excesivos. Tanto Henry Meiggs como Ernest Malinowski dejaron de percibir sus salarios. Al final, el estadounidense decidió financiar él mismo la construcción, sin participación de la parte peruana. Sin embargo, a pesar de tal dedicación, el Ferrocarril Central Trasandino (el nombre que recibió el proyecto) sólo consiguió llegar hasta el pueblo de Chicla (141 kilómetros), hasta el entonces punto ferroviario más alto del mundo, Ticlio (4818 metros sobre el nivel del mar) durante su vida. Esta sección se puso en servicio en 1878. Desgraciadamente, Meiggs no vivió para verlo: murió el 30 de septiembre de 1877.

Seis meses después del estallido de la guerra del salitre con Chile, en 1880, Ernest Malinowski emigró de Perú al vecino Ecuador, donde se involucró en el proyecto del ferrocarril Guayaquil–Quito. A su regreso, en 1886, comenzó a rediseñar las rutas de transporte peruanas y, contratado por la Corporación Peruana, también volvió a trabajar en la reparación y posterior construcción del ferrocarril trasandino.

Pronto empezó también a contribuir científicamente a la recién creada Sociedad Geográfica de Lima, de cuyo comité de redacción formó parte, contribuyendo a la publicación de la obra en varios volúmenes «El Perú», de Antonio Raimondi, que hasta hoy sigue siendo un compendio imprescindible para todos los biólogos y geógrafos dedicados al estudio de la región. La ciencia se mantuvo en el centro de sus intereses durante el resto de su vida; la apoyó donando, entre otras cosas, libros y material de laboratorio a la Escuela de Ingenieros Civiles y de Minas, fundada en Lima por Edward Habich. Cuando éste se marchó a Europa, Malinowski le sustituyó como director durante un año. Es posible que durante un tiempo impartiera clases en la Universidad de San Marco.

Otra instrucción a la que estuvo vinculado fue la Sociedad de Beneficencia Pública. En el marco de su actividad en esta prestigiosa institución, Malinowski se ocupó de sus finanzas y, como inspector, visitó las haciendas puestas en donación bajo su gestión. Además, dictaminó sobre los proyectos del Hospital Dos de Mayo y del hospital psiquiátrico de Lima.

Ernest Malinowski siempre subrayó que era polaco. En muchos de sus proyectos hay una anotación junto a su nombre: «Pologne/Polonia». Ayudó a sus compatriotas, Konstanty Jelski y Józef Siemiradzki, a realizar misiones e investigaciones científicas. Además, contribuyó a la llegada de algunos de ellos a Sudamérica. El grupo, que luego pasó a la historia peruana como los «famosos ingenieros polacos», estaba formado por: Edward Habich, Władysław Folkierski, Aleksander Miecznikowski, Aleksander Babiński, Ksawery Wakulski, Tadeusz Stryjeński.

Hacia el final de su vida, Malinowski padecía una enfermedad cardiaca, la cual probablemente fue debida en gran medida su trabajo en los altos Andes. Murió a la madrugada del día 2 de marzo de 1899 a causa de un infarto. Fue enterrado al día siguiente en el cementerio presbítero Maestro, y es esta fecha la que aparece en el obelisco que el presidente José Pardo y Barreda fundó un año después. Malinowski fue acompañado a su lugar de descanso eterno por una multitud de amigos, representantes de la élite política y científica de Perú y estudiantes.

 

Redacción:

Doctora Danuta Bartkowiak en base a sus propias investigaciones científicas realizadas en Polonia, Perú, Francia y España.

 

Mapa

Miejsce urodzenia


Seweryny, Obwód chmielnicki, Ukraina

Nauka w liceum


Krzemieniec, Obwód tarnopolski, Ukraina

Miejsce emigracji po powstaniu listopadowym i studiów


Paryż, Francja

Miejsce pracy


Francja

Miejsce pracy


Algieria

Miejsce działalności inżynierskiej i naukowej, miejsce śmierci


Lima, Peru

Miejsce działalności inżynierskiej


Arequipa, Peru

Miejsce realizacji fortyfikacji, 2.05.1866


Callao, Peru

Fort (dziś nieistniejący), miejsce udziału w walkach


Santa Rosa, Peru

Stacja początkowa linii kolejowej projektowanej przez Mario Alleona, Gerrita Backusa i Malinowskiego


Pisco, Peru

Stacja końcowa projektowanej linii kolejowej Pisco-Ica


Ica, Peru

Stacja początkowa linii kolejowej projektowanej przez Stephena Crosby’ego, D.N. Paddisona i Malinowskiego


Chimbote, Peru

Stacja końcowa linii kolejowej Chimbote-Huaraz


Huaraz, Peru

Stacja początkowa linii kolejowej budowanej przez Henry’ego Meiggsa, projektowanej przez Malinowskiego i Mario Alleona


Pacasmayo, Peru

Stacja końcowa linii kolejowej Pacasmayo-Guadalupe


Guadalupe, Peru

Miejsce najsłynniejszego mostu kolei transandyjskiej


Puente Verrugas, San Bartolome, Peru

Miejsce emigracji z Peru na okres wojny z Chile


Ekwador

Stacja początkowa linii kolejowej Guayaquil-Quito (A. Harman i E. Morley), przy realizacji której pracował Malinowski


Guayaquil, Ekwador

Stacja końcowa linii kolejowej Guayaquil-Quito


Quito, Ekwador